Si los ocasos sueñan
¿qué sueñan los ocasos?
Nenúfar que sostiene ingrávido
su imagen en el agua
Una sombra proyectada
sobre la noche misma.
Órbita de ese minuto falaz
que tropieza al instante
en que me miro al espejo
y hurgo lo que está hundido en los ojos
como un barco de vidrio.
Abriendo profundidades en el glaciar
que tengo cautivo en el pecho.
Desmenuzando las agujas del hielo.
Evocando la mirada de serpiente.
Al sol de hoy
la espesura es una ruta de piedra
merodeando un hallazgo cotidiano.
Almenas de berilo
Piedra de Ofir
Azul de Prusia
Amarillo de cromo
Verde Veronés
El aroma del espliego
Y la espiga de unas flores azuladas
Me recuerdan la cercanía con que respira la muerte.